- 300 g de carne de ternera.
- 150 g de garbanzos.
- 100 g de lentejas.
- 100 g de fideos.
- 500 g de tomates rojos maduros.
- 1 rama de apio.
- 1 cebolla morada.
- 2 dientes de ajo.
- 2 zanahorias.
- 1 cucharadita de cúrcuma.
- 1 cucharadita de jengibre en polvo.
- 4 o 5 granos de pimienta de Jamaica.
- 1/2 cucharadita de canela en polvo.
- Una pizca de nuez moscada.
- 1 cucharada de perejil fresco picado.
- 2 cucharadas de cilantro fresco picado.
- Aceite de oliva y sal.
Para el caldo
- 1 zanahoria, 1 rama de apio y 1/2 cebolla.
- 4 huesos de ternera.
- 1 cuarto trasero de pollo.
- 1,5 litros de agua (preferiblemente embotellada para no introducir sabores extraños como el del cloro).
La harira es una sopa espesa de la cocina tradicional marroquí, muy consumida durante el ramadán por su gran valor nutritivo y efecto reconstituyente. Esta es mi versión, con un caldo de carne hecho en la olla rápida con unos huesos de ternera, verduras y un trozo de pollo, pero como base de la sopa también se puede emplear un caldo de pollo, o simplemente agua.
Elaboración
La noche anterior ponemos los garbanzos en remojo en un recipiente con agua templada y un puñado de sal.
Por la mañana los enjuagamos bien y los escurrimos.
Introducimos los garbanzos en una red, de esta forma se estropean menos durante la cocción y además, los podremos separar rápidamente del resto de ingredientes al finalizar ésta.
Nota: Estas redes se venden en ferreterías o en tiendas especializadas en utensilios de cocina.
Enjuagamos los huesos de ternera y la rama de apio. Pelamos la cebolla y retiramos la piel de la zanahoria con un pelador de verduras. Quitamos la piel al cuarto trasero de pollo.
Introducimos todos los ingredientes del caldo en la olla rápida y los cubrimos con 1,5 litros de agua.
Calentamos a fuego vivo hasta que el agua comience a hervir, entonces, retiramos la espuma que se forma en la superficie con las impurezas de los huesos y el pollo.
Agregamos los garbanzos, cerramos la olla y subimos el fuego al máximo.
En cuanto comience a salir el vapor, bajamos el fuego casi al mínimo y lo dejamos cocer durante 25 minutos.
Pasamos el caldo por un colador de malla fina y lo reservamos.
Reservamos los garbanzos.
Nota: Si no dispones de una olla rápida, el tiempo de cocción será de 1 h 30 min.
Cortamos la carne en dados de 2 cm aproximadamente.
Lavamos la rama de apio y la cortamos en dados.
Raspamos la piel de las zanahorias con un cuchillo o la retiramos con un pelador de verduras; las lavamos y las cortamos en dados de 1 cm.
Pelamos la cebolla y la cortamos en dados.
Cortamos los tomates en cuartos, retiramos las semillas y los rallamos.
Nota: También podemos retirar las semillas y la piel y triturarlos con la batidora.
Introducimos en el cuenco del mortero 2 dientes de ajo, 4 o 5 granos de pimienta de Jamaica, 1 cucharadita de cúrcuma, 1 cucharadita de jengibre en polvo, 1/2 cucharadita de canela en polvo y una pizca de nuez moscada.
Los machacamos con fuerza hasta que los granos de pimienta y el ajo estén completamente deshechos.
Ponemos 3 cucharadas de aceite en una cazuela a calentar a fuego medio.
Incorporamos la mezcla de especias y ajo, y la rehogamos 1 o 2 minutos, removiendo constantemente con una cuchara.
Añadimos los dados de carne y los rehogamos brevemente, hasta que la superficie esté dorada.
Incorporamos la cebolla, el apio y la zanahoria y seguimos rehogando el conjunto otros 4 o 5 minutos, removiendo de vez en cuando con una cuchara.
A continuación, añadimos el tomate rallado, lo sofreímos durante 2 o 3 minutos y agregamos el caldo y las lentejas.
Lo dejamos cocer a fuego suave hasta que las lentejas estén hechas, aproximadamente 40 minutos.
Por último, añadimos los fideos, los garbanzos cocidos, 1 cucharada de perejil fresco picado y 2 cucharadas de cilantro fresco picado.
Esperamos a que los fideos estén tiernos (el tiempo indicado en el paquete) y listo.
¡Buen provecho!
Nota: El tiempo de cocción de las lentejas depende de la variedad escogida y otros factores, comprueba que estén tiernas antes de añadir los fideos.
En la receta tradicional, la sopa se espesa agregando en los últimos minutos 2 o 3 cucharadas de harina disueltas en 4 o 5 cucharadas de agua y el zumo de 1/2 limón. Yo no lo he añadido, porque me gustan los caldos más ligeros.
Rehogar: Sofreír un alimento para que se impregne de la grasa y los ingredientes con que se condimenta.