- 5-6 zanahorias (450-500 g).
- 2 patatas pequeñas (250 g).
- 1 cebolla.
- 1 naranja de zumo.
- 1 cucharada de mantequilla.
- Nata o queso philadelphia.
- Aceite y sal.
- 800 ml de caldo de verduras o 2 pastillas de caldo concentrado).
Elaboración
PASO 1
Raspamos la piel de las zanahorias con un cuchillo; las lavamos y las cortamos en rodajas grandes.
Pelamos la cebolla y la cortamos en tiras finas (juliana).
Por último, pelamos las patatas y las cortamos en rodajas.
PASO 2
Ponemos una cucharada de aceite y otra de mantequilla a calentar a fuego suave en una cazuela grande.
Agregamos la cebolla y las zanahorias y las rehogamos sin dejar que tomen color, aproximadamente durante 10 minutos, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera.
Incorporamos las patatas y lo dejamos 2 o 3 minutos más.
PASO 3
Añadimos el caldo de verduras y lo cocemos durante 20-25 minutos a fuego suave, manteniendo un ligero burbujeo en la superficie, sin permitir que hierva a borbotones.
Un minuto antes de retirarlo del fuego agregamos el zumo de una naranja.
En esta ocasión he utilizado un caldo envasado y el resultado ha sido muy bueno, pero puedes elaborarlo siguiendo la receta del fondo de verduras.
PASO 4
Añadimos 3 cucharadas de queso philadelphia o de nata.
Lo trituramos con la batidora eléctrica hasta obtener una crema homogénea.
Para conseguir un buen resultado será necesario triturar muy bien la crema, mantén la batidora como mínimo 3-4 minutos.
Rectificamos el punto de sal y listo para servir.
Es habitual enriquecer las cremas con nata para dar mayor untuosidad y una textura más cremosa, pero puedes sustituirla por quesos cremosos como el philadelphia y el resultado será algo más ligero.
Rehogar: Freír un alimento a fuego medio para que se impregne de la grasa y los ingredientes con que se condimenta.