- 750 ml de caldo de pollo o de caldo de verduras.
- 300 g de espinacas.
- 150 g de berros.
- 1 manzana golden.
- 1 puerro.
- 1 cebolleta pequeña.
- 1 cucharada de mantequilla.
- Aceite de oliva, pimienta negra molida y sal.
Para decorar, semillas de amapola y unos pequeños dados de queso de cabra.
Elaboración
PASO 1
Pelamos la manzana, retiramos el corazón y la cortamos en trozos no muy gruesos, como se muestra en la imagen.
Lavamos el puerro y le quitamos las raíces y las hojas verdes, dejando solo las partes blancas y de color verde pálido. Lo cortamos en rodajas finas.
Quitamos la primera capa a la cebolleta y la cortamos también en tiras.
Nota: No es necesario hacer cortes muy regulares porque al final lo vamos a triturar todo.
PASO 2
Ponemos 1 cucharada de mantequilla con 2 cucharadas de aceite de oliva en una cazuela amplia a calentar a fuego suave.
Echamos la cebolleta, el puerro y una pizca de sal. Los rehogamos durante 3 o 4 minutos sin que lleguen a tomar color, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera.
Seguidamente, añadimos la manzana y seguimos rehogándolo otros 3 o 4 minutos.
PASO 3
Incorporamos el caldo de pollo y lo dejamos cocer a fuego lento durante 15 minutos, hasta que todos los ingredientes estén muy tiernos.
PASO 4
A continuación, añadimos las espinacas, los berros y una pizca de pimienta negra molida.
Lo dejamos cocer otros 3 o 4 minutos.
PASO 5
Para terminar, trituramos los ingredientes con una batidora hasta obtener una crema fina y homogénea, al menos durante 3 o 4 minutos.
Rectificamos de sal y listo.
Para obtener una crema realmente fina y aterciopelada, lo mejor es triturar los ingredientes con una batidora de vaso de gran potencia, pero si no dispones de una, se puede preparar con la batidora de mano sin ningún problema.
PASO 6
Servimos la crema con unas semillas de amapola para decorar y unos pequeños dados de queso de cabra, como se muestra en la imagen.