- 1 kg de calamares (pueden ser congelados).
- 2 tomates rojos maduros.
- 1 cebolla.
- 1 pimiento rojo.
- 2 dientes de ajo.
- 1 vaso de vino blanco.
- 3 patatas medianas.
- 1 cucharada rasa de pulpa de pimiento choricero (opcional).
- Aceite de oliva, pimienta negra molida y sal.
Elaboración
Pelamos los tomates, retiramos las semillas y los cortamos en dados.
Pelamos la cebolla y el ajo y los picamos finito, como se muestra en la imagen.
Limpiamos los calamares o pedimos en la pescadería que nos los limpien. Los cortamos en cuadrados de 3 o 4 cm de lado.
Asamos el pimiento
Lo ponemos en una fuente apta para el horno; rociamos un chorrito de aceite por encima y espolvoreamos un poco de sal.
Lo metemos en el horno, precalentado a 180 ºC, entre 50 y 60 minutos, dándole la vuelta a la mitad del tiempo, cuando veamos que la piel está bien dorada.
Al sacarlo del horno, lo envolvemos en un trapo y lo dejamos enfriar durante 10-15 minutos, de esta forma resultará mucho más sencillo retirar la piel, si está bien asado saldrá sin ningún esfuerzo.
Por último, lo abrimos, retiramos las semillas y lo cortamos en tiras finas.
Ponemos 1 cucharada de aceite en una cazuela amplia o en una sartén antiadherente a calentar a fuego vivo.
Cuando esté caliente, salteamos los calamares en 2 o 3 tandas con una pizca de sal. Solo 1 o 2 minutos, hasta que estén doraditos.
Los retiramos de la cazuela y reservamos.
Ponemos 3 cucharadas de aceite a calentar en una cazuela amplia.
Añadimos el ajo y la cebolla y los cocinamos a fuego suave durante 20 minutos, hasta que la cebolla adquiera un bonito color dorado, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera.
A continuación, agregamos los dados de tomate y lo seguimos cocinando otros 10 minutos más.
Agregamos los calamares, 1 vaso de vino blanco y 1/2 vaso de agua.
Salpimentamos, añadimos la pulpa de pimiento choricero y lo dejamos cocer a fuego muy suave con la tapa puesta entre 45 y 50 minutos (o hasta que los calamares estén muy tiernos).
Pelamos las patatas, las cortamos en dados pequeños y las incorporamos junto al pimiento rojo asado en los últimos 25 minutos de cocción.
Rectificamos de sal si es necesario y listo para servir.
¡Buen provecho!
Nota: Antes de retirar la cazuela del fuego comprobamos que las patatas estén bien cocidas por si fuese necesario tenerlas unos minutos más.
Saltear: Saltear es freír los alimentos a fuego vivo con poco aceite. Así conseguimos dejarlos tiernos por dentro, pero sin perder su textura crujiente, alterando sus propiedades mucho menos que con otros tipos de cocción.